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domingo, 30 de diciembre de 2018

COMENTARIO SOBRE ¡EXHORTO! DE SALOMÓN GARCÍA




Comentario sobre ¡Exhorto!, de Salomón García

   Los poemas de Salomón García nos interpelan en cuanto son los vívidos testimonios de un sindicalista que tiene mucho que decir sobre estos tiempos de trabajo precario y de tercerización de servicios (outsourcing). Los trabajadores de la cultura de la región peruana (como todos los que viven de un salario o sueldo) están insertos en un contexto de globalización económica y este fenómeno nos afecta como individuos y colectivo. Los sindicatos se vienen recuperando paulatinamente de nefastas épocas en las que el gobierno canalla de Fujimori arremetía ferozmente y proponía (siguiendo los dictados del FMI y el Banco Mundial) una flexibilización laboral irrestricta para abaratarles los costos a los empresarios con el fin de hacerlos más competitivos. En la práctica, esto se tradujo en una sistemática política antisindical y de sobreexplotación laboral sin misericordia. Ciertamente, los jóvenes fueron (son) los más afectados de la PEA.
   De esta forma, es plenamente entendible y justificable la indignación (y la rabia) contra los politiqueros y causantes de este statu quo. Y Salomón no se arredra ni se calla en ¡Exhorto! “Cómo te han de doler tus entrañas nación nuestra”, dice en “Llaga fresca”, uno de sus poemas más sentidos. Como buen hijo de la comunidad autogestionaria de Villa El Salvador, también le canta exaltado en “Tierra prometida”.
   Entre nosotros, hay extraordinarios poetas de combate y de versos flamígeros que nos sirven de referentes imprescindibles. González Prada, Leoncio Bueno, Edgardo Tello, Javier Heraud, Manuel Scorza, Magda Portal, entre otros, son algunos de ellos. Y no solo nos referimos a sus textos, sino a la hermosa coherencia entre poesía y ethos. 
   Es palpable la gran indignación y la recusación en poemas como “Represión”, “Llaga fresca”, “A bodrios y cacasenos” y “Los resistidos”, aunque todo el libro de García está trasegado por un “relámpago perpetuo” (Scorza dixit). Asimismo, se percibe claramente la esperanza y lo que enunció Scorza en uno de sus poemas más emblemáticos: “el rumor de un pueblo que despierta / ¡es más bellos que el rocío!”.
   Por consiguiente, este libro de Salomón García se debería leer con voz alta, estentórea, para ser escuchado y asimilado por las masas esquilmadas, pero esperanzadas en un futuro sin amos ni opresión. Salvo mejor parecer.

Márlet Ríos, escritor, sociólogo y exsindicalista

domingo, 16 de diciembre de 2018

PUBLICACIÓN 2018 "PATRIA LARGA" DE JORGE ITA GÓMEZ




Chile el país que limita con nosotros al sur, siempre se ha sentido como un hermano en poesía. Todos tienen un amigo en Chile, algún poeta, un narrador, un músico o un artista plástico. Siempre han habido cosas que nos permiten sentir admiración el uno por el otro. Mistral, Neruda, De Rokha, Rojas, Hann, Zurita, Hernández, son algunos de sus poetas que nosotros leemos y admiramos. Muchos festivales y encuentros poéticos se han desarrollado con una gran presencia de ambos países.

Las experiencias de viajes de nuestros poetas son similares a los de los poetas chilenos llegando al Perú. Compañerismo, familiaridad, amor, cariño de hermano, puertas abiertas, oportunidades de difusión poética y admiración. Terminando todo ello en unas ganas de volver al lugar que se visitó.

En base a ello es que se construye este libro. Desde los minutos de espera en el aeropuerto, el trayecto se va describiendo con el pasar de los versos y las páginas. El vuelo, la llamada esperada, las comidas, los lugares, las personas, el cariño y también el amor. No pueden faltar en estas líneas.

Jorge Ita nos comparte su cariño por el país. Lo que se hace notorio desde el título: "Patria larga", haciendo alusión a la extensión territorial del país sureño, los versos se van escribiendo con el cariño que el poeta le tiene al país y su gente, hasta adaptarse al lenguaje; así leeremos palabras propias de ellos, como: "Po", "chilito", "chuta", "estai", entre otros. También los lugares como: "Viña del Mar", "Rancagua", "Valparaíso", etc,  Leamos algunos versos de este libro que viajó precisamente por tierras mapochas para compartir el amor de un hermano peruano por una patria hermana.

AEROPUERTO

Tráfico infernal en hora punta
El taxi amarillo de pura rabia
Ni avanzar ni retroceder
Peste por todas partes
Y mi reloj a punto de estallar
Gente como hormigas
Aeropuerto Internacional
Jorge Chávez-Lima-Perú
Aviones como moscas
Aterrizando o alzando vuelo
En mi taza de café con leche


LLAMADA INTERNACIONAL
(en modo avión)

Ruego a Dios en las alturas
En que me encuentro
Volando espacios aéreos
De otras lejanas naciones
Por asuntos culturales
Que por fin entre tu llamada


EL TENIENTE

Como Julio Verne lo soñara
Y describiera alguna vez
En su novela fantástica
Viaje al centro de la tierra
Yo también viajé alucinado
Como al vientre de mi madre
A las entrañas mismas
De la mina El Teniente
Desde entonces mi visión
Del mundo no es la misma
Cambió mi vida para siempre


FRATERNIDAD AL CANTO

Va floreciendo mi canto
Triunfante a Chile
Como las flores
Del Copihue o la Cantuta
Flor nacional del Perú
Como el amor también
Entre rosas y espinas
Copas de vino tinto
Y versos triunfales
Va floreciendo mi canto


SÍMBOLO DE LA FUNDACIÓN
Pablo Neruda

Está mi corazón palpitando
De la pura contemplación
Como una tierna manzana
O pequeña campana verde
Al punto total de estallar
En su bronce magnífico
Juntito al pino remojado
Por la lluvia y por la luz
Veleta pararrayos girando
Como loco sobre el tejado
Al cabo de tantos años
Fruto plateado del mar
Plantado en tierra firme
Símbolo de la fundación
Pescado de ojos grandes
Guardaos el color del óxido
En el pelo de las chilenas
Y tímidas estrellas de mar


PATRIA LARGA
Jorge Ita Gómez
Marzo 2018

jueves, 15 de noviembre de 2018

NUEVA PUBLICACIÓN DE ÁNGELES DEL PAPEL EDITORES "MEMORIAS HABANERAS" DE DENISSE SANTISTEBAN VALLE





MEMORIAS HABANERAS


Escrito por: Paolo Astorga


Memorias habaneras (Ángeles del papel editores, 2018) de la poeta Denisse Santisteban Valle (Lima 1981) es un libro rítmico y melódico. El amor desde la soberanía del Eros y la naturaleza componen el alma de este poemario. La poeta escribe desde la transparencia, desde la sencillez de las palabras cargadas de deseo, de un profundo anhelo por la fusión con lo amado, pero también desde la pasión, desde el reconocimiento del otro como dador de vida, de placer. El poema que abre el libro, A ti (p.7), es un ejemplo patente de ese anhelo de volcarse en el otro hasta la fusión.

La poeta ha escrito este libro como un diario del amante, una serie de momentos donde lo musical, lo natural y el Eros, se hacen profundidad, deseo y pasión. El trabajo del lenguaje en Denisse es el trabajo de lo sonoro, del movimiento rítmico que nos mueve y conmueve. El poema Emoción (p.8) es un ejemplo de ello.

A lo largo de este breve pero intenso poemario, la poeta nos recuerda que ha bebido de la mejor poesía romántica del siglo XX. Neruda, Lorca, Benedetti. Discursos que se pueden notar en su poética, donde la anáfora es la figura literaria por excelencia. Poemas como Si... (p.13), muestran esa influencia donde se mezcla el sentimiento amoroso con lo revolucionario, entendido como cambio, como resistencia ante la muerte, ante las lejanías, ante el dolor y el vacío.

Pero, a mi gusto, el poema que le da una personalidad muy interesante al libro es Viceversa (p.14-15). Un poema cuyo lenguaje fundado en la sencillez cobra una fuerza inusitada cuando el ritmo y la musicalidad del poema nos llevan de la mano hasta el éxtasis. Un hermoso poema de antología.

En suma, Memorias habaneras es un libro escrito desde la sinceridad, desde la sensualidad. Un libro para el amplio público, para todos. El amor nuevamente es la veta inagotable de belleza, de imágenes, de anhelos y afectos. La pasión que ha volcado la poeta en este poemario es proporcional a su magistral uso de las rimas y anáforas. Este es pues, una invitación para reconocernos vivos, llenos de deseo y, sobre todo, humanos ante la vida.



ANTE-VIDA

Te ví
y los segundos que llevaba
entre las manos
se me plasmaron en la piel
como tiempo detenido.
Te reconozco
desde milenarias ante-vidas,
en la profundidad
del océano de tus ojos,
en el sol de tus fuertes brazos,
en tu boca de infinito.

Me detuvo
el deseo,
la pasión extrema
y también el temor
de descubrir que en esta existencia
alguien más es uno contigo.

¿Ser o no ser?
Primero pienso, luego desisto
y resisto,
resisto estoicamente
para no beber del aire
que hoy es de otra sangre,
que siglos atrás renaciera
de mi química más pura
de mi esencia más básica
de mi tú que ya no es mío,
de lo que hay de mí en tu ser,
de mí o lo que queda de mí
desembocando en los caudales
de las venas de tu alma,
de mi yo que de ti fluye,
de mi tú que me hace falta.


VICEVERSA

Me gustas donde te quiero,
te quiero donde me gustas,
te quiero aún si me disgustas,
me gustas con desespero.
Me gustas cuando lo callas,
te quiero cuando lo dices,
te quiero en tus ratos felices,
me gustas con tus murallas.

Me gustas liberal,
te quiero cautivo,
te quiero esquivo,
me gustas literal.
Me gustas ausente,
te quiero conmigo,
te quiero castigo,
me gustas ardiente.

Me gustas solitario,
te quiero imperfecto,
te quiero insurrecto,
me gustas libertario.
Me gustas así, idealista,
te quiero en mí albergado,
te quiero total y extasiado,
me gustas humano y artista.

Me gustas de abrigo,
te quiero diamante,
te quiero de amante,
me gustas de amigo.
Me gustas con tus matices,
te quiero en tu esplendor,
te quiero en el dolor,
me gustas con cicatrices.

Me gustas cuando te pienso,
te quiero cuando me piensas,
te quiero en horas intensas,
me gustas en el silencio.
Me gustas inexplicable,
te quiero cuando me miras,
te quiero cuando suspiras,
me gustas inolvidable.

Me gustas cielo profundo,
te quiero mar adentro,
te quiero en mi centro,
me gustas en mi mundo.


SI…

Si me amaras
habrías descubierto el paraíso bajo la lluvia.
Si me buscaras
me encontrarías cual luna, iluminando tu mirada de mar.
Si me sintieras
recorrería tu cuerpo de norte a sur, como cálido aguacero.
Si me eligieras
seríamos compañeros y artífices de una nueva revolución;
revolucionaríamos el concepto de amor - pasión
llevándolo a niveles desconocidos,
al punto cumbre del uno mas uno
que no llegan a ser dos, sino uno solo,
un todo, un todo en uno… un TODO
de tú mas yo
en su máxima expresión,
en su quintaesencia,
en su patria o muerte,
en su séptimo cielo.
Si te quedaras
reescribiríamos la historia

de todas nuestras vidas compartidas.


MEMORIAS HABANERAS
Denisse Santisteban Valle
Ángeles Del Papel Editores
octubre 2018

miércoles, 14 de noviembre de 2018

6 POEMAS DE IVAN FERRINI "EL DORGUS"



Ivan Ferrini, Alex y Juan Carlos Guerrero


Nadie nunca siente más la partida de una persona que los seres queridos y los amigos cercanos. Hace poco tiempo nos dejó Ivan Ferrini. Poeta cañetano, quién nos legó un único trabajo personal impreso Poemas de amor: entre arrecifes de una Atlántida moderna, plaqueta que ahora queda a la posteridad con sus poemas, como prueba fehaciente de su poesía y su trabajo literario.

Agradecemos el envío de sus textos al amigo Juan Carlos Guerrero, compañero de aventuras y conversaciones del finado poeta cañetano. Dejamos unos poemas de "El Dorgus", como lo conocían.





VIAJE TRIDIMENSIONAL
Sentado  solo
frente a una copa de vino
recordando aquel futuro
del cual todos somos ajenos
veo mi rostro reflejado entre los arrecifes
de una Atlántida Moderna
en la cúspide del fondo marino
de las heladas tierras de Marte.
Llevo en un saco algo misterioso
que no os aconsejo abrir ni por curiosidad
pues te encontrarás con la cabeza de una medusa rasta
que la traje de mi viaje hacia ninguna parte.


EL INVITADO INESPERADO

Hoy están de fiesta los dioses del Olimpo
hay toque de queda dos días y dos noches
el Padre Tiempo luce su mejor traje
estrena su corbata nueva de orquídeas doradas
suenan trompetas entonando hermosas melodías
al entrar a palacio todos se quedan admirados
pues nadie me conoce, pero sin embargo
soy el invitado de honor
llevo en un cofre sellado
a la criatura del Lago Ness
como regalo para mi amigo Zeus.


CIUDAD FLOTANTE

Sentado sobre la hierba de un campo fértil
respirando ese aire puro de mis Andes
lejos del bullicio de una ciudad corrupta
de pensamientos abstractos e insípidos
donde al justo se le condena
con la muerte de expresión
mientras estornuda un tal Vesubio
sobre el cielo del olvido
resfriado por la frialdad de los mortales
y no miro hacia atrás
para no ver el llanto de una ciudad
momificada de plegarias ingenuas.


DESTINO INCIERTO

El amor no está ausente en mi vida
está presente como la sombra
que alumbra mi destino
que grita a los cuatro vientos que soy malo
que debí morir al nacer,
bueno, en fin, hay una sombra
que atormenta mi destino
lo cual es incierto y falso;
a veces me pregunto
si soy culpable de venir al mundo
y ser tratado como hasta ahora
nunca pude decir que fui feliz al lado de los míos
pues siempre estuve al margen
de todo tipo de elogios
a veces quisiera no haber nacido
ya que era feliz en aquel: Mi pequeño mundo compacto
antes de ver la luz del Sol.
  

ALMA PURA Y CASTA

Soy un perdedor por excelencia                                      
rara vez concreto una meta
siempre estoy al margen
de todo tipo de elogios
no puedo definir la palabra amor
ya que en mis labios suena
como coro de ángeles
es decir, se oye como los mil demonios.
Carajo, no lo puedo creer pero es cierto
es una vaina ser hermoso de corazón
y tener el alma pura y casta
como una hembra criada a la antigua
que no atraca bajarse el forro
(hasta después del matrimonio)
para así, poder fornicarla como si se acabara el mundo.
El colmo de la mala suerte es ser misio
sensible, soñador y poeta
ya que vives eternamente enamorado de la vida
y ésta que es una perra
pues te trata como una basura
y adonde vas nunca encuentras felicidad.
Enamorarse es de tontos: dicen algunos
pero yo creo que es de valientes
templarse de una cojuda que no te hace caso
que nunca te va a ver como un hombre
bueno, si ella te detesta
es un paso que has avanzado
al menos se da cuenta de que existes
y por ella, la botella.
Cuantas veces en el baño o en tu cuarto
 te has masturbado, pensando
en la flaca que te gusta,
alucinando, llegar a su alcoba
para besar su cuerpo con ternura infinita,
insaciablemente hasta los huesos,
claro, como un buen samaritano del sexo.
  

UNA BALA CON LAS ALAS DE MARIPOSAS

Que esperas aún estas tiempo
para poder escapar de tus convicciones
sé libre como una mariposa
que vuela de flor en flor esparciendo su aroma
y no permitas que te roben la sonrisa
que alguna vez dibujé en tus labios.

Corre con todas tus fuerzas y no mires atrás
no quiero que seas mi estatua de sal
me vas a odiar y yo te voy a amar por siempre.

Permíteme desplegar mis alas para poder volar a la inmensidad
déjame escapar de tu recuerdo...déjame ser libre
aleja de mí éste trago amargo que reseca mis labios
como las hojas del viejo sauce.

Sombra existencial que nubla la voluntad de los mortales
y siembras la duda en sus corazones inertes
inexpresivos ante el sufrimiento cuando son despojados de sus almas
cristalizados en ámbar hasta la eternidad
cuando se dejan seducir por el lado oscuro.

Ahora sé porqué te quedaste inmóvil
sin gesticular movimiento alguno
solamente tus ojos me miraban con devoción
fue en ese instante en que me convertí
en presa fácil para tu pasión desenfrenada
tus labios exprimieron todo mi ser
yo me encontraba bajo el efecto del éxtasis de tu cuerpo
de aquello tú aprovechaste para despojarme de mis armas
cuando reaccioné ya estabas apuntándome a mi pecho
solamente sonreí y extendí los brazos



IVÁN FERRINI 1979- 2018. 

Poeta, convencido de que escribir no es más que un acto suicida. Sus poemas han sido publicados en distintos medios escritos como: Espartako, Gut- Val, Bitácora de Cañete, Piel de Kamaleón. 
En el 2010, público la plaqueta  Poemas de amor: entre arrecifes de una Atlántida moderna. Ha sido antologado en la muestra poética. Territorio Huarco, en el 2012.


domingo, 11 de noviembre de 2018

NUEVA PUBLICACIÓN DE ÁNGELES DEL PAPEL EDITORES; "OTOÑO EN DICIEMBRE" DE MIRTHA MANSILLA NIETO




OTOÑO EN DICIEMBRE

Escrito por: Paolo Astorga



Otoño en diciembre (Ángeles Del Papel Editores, 2018) de la poeta Mirtha Rosario Mansilla Nieto (Lima – Perú, 1971) es un libro que mezcla la ternura y dolor desde una perspectiva fresca e intensa. Y es que desde el título podemos mapear que la poeta quiere mostrarnos desde el juego de los contrarios, desde la paradoja, la temática implícita en todo el libro: lo funesto, la pérdida de lo amado, los recuerdos. Diciembre es la representación del calor, de lo vivo, del placer, sin embargo otoño es el símbolo de aquello que está muriendo, que se acaba, que se pierde. Entonces en esta paradoja, en esa dialéctica, se funda un libro donde las reminiscencias y lo íntimo cobran una fuerza inusitada.

La poeta inicia su discurso con una visión personal de lo amado. El poema El sillón rojo (p.9) es la imagen de la infancia, el objeto que con el lenguaje y los recuerdos cobra vida y se llena de amor, pero a la vez de nostalgia, de tristeza y cierta frustración, pues la poeta solo puede reconocer en esas imágenes el pasado, lo ya vivido, mas no el presente, nunca lo patente.

La imagen del tiempo es recurrente en estos poemas. Hay un discurso desde la perspectiva del paraíso perdido y además, una búsqueda incansable de una profunda ternura, aquella que nos rescata de lo sórdido, de la indiferencia o lo violento del tiempo que nos va desolando, que nos va terminando hasta desmoronarnos en el silencio. La poeta lo sabe por ello poema como Reloj de arena (p.12), asistimos a la presencia del tiempo y de los actos de lo cotidiano que luego se convierten en símbolo de aquello que se ha vivido y también de lo que se ha perdido. El poeta evoca lo sensitivo (tocar, acariciar, lo luminoso y lo oscuro) y el movimiento, para luego terminarnos con una imagen de lo inmóvil, signo patente de la pérdida.

Más adelante, la poeta ahora recuerda aquello amado que está más cercano a una maternidad perdida, a una serie de remembranzas donde los personajes femeninos sufren la muerte, el vacío y la soledad, pero también (y es aquí donde la poeta logra un lenguaje muy personal y bello), la ternura resistiéndose al olvido y al mismo dolor. Poemas como Anita (p.17) o el genial e intenso Un canto de amor a Evita (p. 18), nos muestran de una manera transida de amor y ternura el amor hacia aquello que duró muy poco, pero que marcó la vida. Sin duda nuevamente, es en ese último poema donde podemos mapear una maternidad frustrada donde el discurso poético intenta reconstruir los instantes para lograr nuevamente la unión de vida entre la madre y la hija.

Y es que los poemas de Mirtha se degustan con lentitud, se deben saborear con cada verso, con cada palabra. La poeta sabe muy bien que la poesía es ante todo lenguaje, palabras que transportan un secreto, una imagen, un instante significativo. Es por eso que a lo largo de la lectura de este poemario, el lector no quedará nunca indiferente o decepcionado. La poeta en su ánimo de dotar de vida aquello que ya se ha perdido en el tiempo, intenta de múltiples maneras la unión, el acercamiento, la reconciliación. Por momentos nos encontramos ante poemas donde hay un deseo por recrear el íntimo pasado y luego nos adentramos a una poesía más introspectiva, donde el deseo por reconstruirse, por liberarse de las ataduras del tiempo y sus desmoronamientos se convierte en el discurso principal. Retrato (p.27) es un poema que ejemplifica aquello que se plantea como una lucha contra el tiempo, un reconocimiento de la nostalgia, pero también el importante acontecimiento de reconocer la finitud de lo humano y encontrar allí, en esa imposibilidad de estirar los momentos, la belleza.

En suma, Otoño en diciembre es un libro exquisito, lleno de referencias a la infancia, la maternidad, el amor, la vida y el tiempo. Mirtha ha logrado un excelente trabajo de orfebre, ha sabido darle significado a sus múltiples estéticas: la del tiempo, la del barro, la sensitiva, la visual, la de las distancias y las cercanías. Aunque en este breve pero intenso poemario, el dolor es central, hay en cada poema una voz que se resiste, que se enfrenta e intenta renovarse en el discurso y mostrar la paradoja de lo humano. Sin duda un libro para disfrutar y hacerlo nuestro.




El sillón rojo


Hoy regresé en el tiempo y me vi parada frente a una casa que vestía blanco y negro. Lentamente empujé la puerta con la mano y me encontré en un salón decorado con paredes grises como fotos de antaño y en el aire un aroma conocido que ya lo había respirado, seguí despacio recorriendo el salón de cuadros finos con bordes dorados. Asomada desde una esquina divisé el cuarto de al lado, y en él, un sillón rojo que resaltaba entre el murmullo del pasado. Mi mente no entendía lo que estaba observando: dos niños con sus padres que jugaban y sonreían para un retrato que yo sostenía en mis manos.


Anita


Manitas mi niña decías
cerquita 
despacio decías
subida en tu sombra soñaba 

Manzana dulce por las mañanas
pollera adornada de cuentos
ojitos pequeños mamita
despacio decías 
Tita
Tita

Zarah en dulce diciembre


Tu voz arrulla mis sueños en dulce diciembre
mis manos aferradas al alba de tus días y en
mi historia el murmullo de tus labios al rose
tenue de tus caricias dormidas en mi espalda

Mi niña, te robas con dulzura mis abrazos y
en tu largo cabello negro la primavera se
recuesta para silbarte al oído un mil
te quiero



OTOÑO EN DICIEMBRE
Mirtha Rosario Mansilla Nieto
Ángeles Del Papel Editores
Septiembre 2018



martes, 23 de octubre de 2018

"UNA HOGUERA BAJO EL AGUA" DE VÍCTOR GUILLÉN




Hace algunas semanas, conocí por intermedio del poeta Mario Ávila al autor del libro que les presentamos a continuación, me obsequió este ejemplar para poder hacer la difusión respectiva en el blog. Poeta con varios años de labor, publicó su primer trabajo el 2003 y luego fueron viniendo más libros, como el que a continuación ofrecemos al lector: "Una hoguera bajo el agua" del poeta Víctor Guillén, editado el 2014, bajo el sello Lustra. El poeta nos ofrece 23 poemas sin nombre, únicamente numerados cronológicamente. Dejaremos al lector con algunos de sus poemas. Degustad de los versos.


2

El patio estuvo aquí
donde soy un vago recuerdo
entre el are azulino
de la tarde
hacia mi izquierda se extiende
tras la pared medianera
el jardín:
deslizamiento floral
hacia el espacio pretérito
de los tres primeros pasos
en zapatitos de charol
que lo recorrieron
envueltos en aroma de flor
verdor devenido
en deshojado rosal
porque soy esta arcada
de esdrújulas vibrantes
tal cuerdas de guitarra
desde mi patio sumido
en su hora de concreto
desde mi jardín sumido
en su hora floral
habitablemente paralelos
y declina puntual la existencia
por mi patio de lajas
por mi fragante jardín
y hoy que llevo un cielo
trémulo en mi ojo izquierdo
y un cielo desvanecido de alas
en mi ojo derecho
me inclino por la sombra pródiga
que oculta jardín y patio
y me oculta
                     a mi mismo
de las develaciones estivales


11

Entonces
qué hacer con la flor
que gemrinó de la música
y no de la flor
porque en flor
ya la música
desde la campana
sinfónica del trombón
que siendo bella
     hiere
si no fuga
al solícito oído
ya nada despierta
   en música
así
el trombón sufriente
así
el espectral trombonista
moribundo uno
sin lirismo
           ni acordes
                     ni pistones
muerto el otro
aquel ejecutante
que elevó a flor
fenecido jardín
savia sabia
rítmica flor
de tonal color
y volátil estructura
ahora
después de toda sinfonía
nos redime el silencio
absoluto y resuelto
ahí nuestra natural
   interpretación
sin voz ni instrumento
sin embargo aún yace la flor
en la entraña del trombón
y en la entraña de un fantasma


16

el paso ya
sombra muerta
    cuervo
                 sin cielo
es la casa
   en tanto un abrigo
      más negro
que la nocturna ave
de Luzbel
cubre de súbito
un cuerpo
sombra que el cuerpo
          detenta
al pie de una sombra
      tramo
de Hades o cuerpo
ya que impalpable
en mano Hacedora
el cuerpo enfundado
en maligno abrigo
   deviene
en cuervo o cuerpo
el cuerpo y su abrigo
negro
          no cuervo
no cuerpo
                solo
vuelo de cuervo
el cuerpo
              así
ni casa
      ni cuervo
suman
casa más cuerpo
ni en el cuerpo
que es la casa
ni en la casa
que es el cuerpo


VÍCTOR GUILLÉN
Una hoguera bajo el agua
Lustra Editores
2014



martes, 9 de octubre de 2018

" APURIMAC RADIO PODER" DE ÁLVARO CORTÉS MONTUFAR



Estimados lectores ofrecemos para vuestra lectura, unos poemas desde el libro APURIMAC RADIO PODER, publicado el 2017, por el joven poeta ÁLVARO CORTÉS MONTUFAR. Gracias a su gentileza hemos recibido vía correo estos poemas, para poder compartirlo con ustedes queridos lectores. 


KAIRÓS

Yo coloqué tu nombre en negrita y subrayado y
en letra cursiva
arial tamaño 20, para que sobresalga a todo
junto a unos versos que ya no podían callar
como este grito vigoroso que estalla desde aquí
que estalla desde las entrañas de la poesía vital
y se reproduce más rápido que el ctrl + c / ctrl + v
como aquel playlist de The Doors que colocamos
cuando hacemos el amor o después de hacer el amor
y desenterramos un carmín luego de la lluvia
que llega para mojarnos la pena y refrescarnos
                        las costras
y borrar todo y regar raíces que buscaremos donde echar
pero no en esta sociedad que se va a villa, regresa
y no pierde su silla
pero se la roban y se roban tu vida y todo.
Pero conservamos la sed de nuestros cuerpos
y la energía de vivir y poblar de manzanos tu sexo
y poblar de poesía la tierra y con la poesía
una nueva realidad.
Porque aquí comienza la vida: sentados en medio
de la Plaza
rodeados por la masa: un cúmulo de sueños listos para
fermentar más sueños
y colocar peldaños y levantar escaleras y escombros.
Yo traje esa costumbre de encendernos con aguardiente
y hacer danzar mi lengua de fuego sobre
tu vientre blanco y luminoso
y reírnos de la muerte a cada día y festejar la vida:
el ser dos notas musicales en una partitura de Chopín
el ser dos jugosos ciruelos bañándonos de sol.
Grito tu nombre como loco y me aprieto a tu pecho
como loco
a tu pecho y a tus ganas de vivir y ser un nuevo
paradigma en el kairós
y muerdo tus labios y duraznos y el deshielo del
Coropuna moja la A de tu nombre a la que
me aferro como loco.
Y vamos Lady Cristobal atravesando por pantanos
jubilosos y exaltados como en medio de un cuadro
de Eugène
con nosotros y con ellos y con ustedes y con el etecé
que acompaña
vamos untando de mermelada esta situación para digerirla
esta calle 28 de julio tan San Juan de Dios
tan parque Duhamel
y el mundo ha destrozado a pedazos la teoría poblacional
de Malthus
porque sí hay torta para todos, pero no todos están
invitados a la fiesta.
Y subimos al bus y nos acompaña un techno furioso y tropical
y el ritmo con el que se construye una casa sincera
con el que se construye un país, una marcha popular
zapateando excitada por el arenal, por el monte.
We want the word and we want it now. Como Morrison
pero sin él. Pero sí con Segundo y Catalina y Jesús y
el Alvarucha y el Adolfucha
existiendo en una lliclla a espaldas de su abuela y de la muerte.




BALADA METAL PARA COMERCIANTES AMBULANTES

I
Le abro los ojos al cielo y le saco un par de monedas a tu bolsillo.
Vean mi lengua de fuego devorarse hambrienta a la mediocridad.
Para contemplar el sol es necesario aprender a saborear la luna
y para saborear la luna hay que aprender a hacer
correctamente el amor, en habitaciones dulzonas de hotel
o en quebradas bellísimas erosionadas por el viento.
Hay que renacer en los andes y cultivar azucenas en los
dulces ojos de los osos de anteojos.
Luz y belleza salvajemente acomodadas en el pensamiento andino,
como en una balada metal cantada con violencia
para enamorarse.
II
Fue también la violencia que hizo que abandone mi ciudad
(al igual que tú)
y me aventure en la gran urbe y en el delírium trémens de sus
calles meadas de dolor
y en tus ojos: hermosísimas acuarelas timonel de la embarcación
que soy yo siempre a la deriva.
Sintonizas la fm de cumbia e historias cachondas para
taxistas enamorados
en tu puesto ambulante peruvian fast food para los gringos
desojas panecillos margaritas bellas como un marfil musical.
¡Oh tía veneno! tus manos como cáscaras de huarango,
ásperamente hermosas
preparan hamburguesas para bohemios náufragos animales de
la noche
sobrevivientes al pogo celestial de los ritmos amatorios del rocanrol
ofreces con cariño la carta, y salsas al gusto:
A) Hamburguesa de carne………..s/. 4.00
B) Hot dog………..s/. 3.00
C) Hamburguesa de chorizo………..s/. 4.50
D) Radiantes girasoles rebosantes en plenitud, purito
sentimiento, casero. Más sinceros que el reflejo del agua en
la laguna Pacucha………..s/. Una habitación llena de versos
hasta la altura a la que llegue mi mano.

III
Y yo puedo escribir cantar mi certeza tan hermosa como tus
ojos y tus manos
y las plantas de tus pies que atraviesan media ciudad, como yo
buscando soñando a Mayo y sus muslos pálidos como
un ice cream.
El tiempo no ha enfriado tu corazón ni tu radiante forma de amar,
a pesar del Perú,
que caracteriza a la gente criada en íntimos lugares que son como
un precioso árbol dándole sombra a todos y compartiendo
sus frutos dulcísimos como tu sexo.
Ahora que estás en Arequipa, no olvides recargar tu celular para
llamar a tus padres y contarles que el cielo es como un verso
explosivo y precioso de una canción top de los
Shapis (ambulante soy).
Fue esa misma canción pirateada en un DVD compilatorio que
ofrecías en los mercados
que te permitió educar a tus hijos y mandarles una encomienda
a tus padres
seres espléndidos que trabajan la tierra y el amor.
  

PARWA

I
Llega un sonido exagerado como un navío transatlántico
desde tu pecho
para encender la noche y mi alma y mi cuerpo
y librarlo de la sombra / canción en mute.
Llega un sonido exagerado como tú llegando a la
Av. Nuñez cuadra uno
al compás de una rock song de Pink Floyd / learning to fly
y he aprendido a volar sólo para subir y verte leer Monte de Goce
y solearte en tu patio, a las 12 del día a las 3 de la tarde.
Tú floreces viva y contorneada como una flor de maíz entre
mis brazos
y tus muslos de seda hermosos como un manojo de yerba
tendido sobre la mesa
te escribí entonces una carta enviada por inbox, que decía:
Oh Parwa! Tu rebeldía es cieloscuro como una lluvia
derritiendo el plástico.

II
Nuestra larga avenida que conecta Abancay y Tamburco
es también una palabra borrada del diccionario
ya no sabremos decir adiós.

III
Y aquí me tienes encendiendo inciensos en tu pubis,
bosque tropical en pleno invierno
y a tu paso vuelan azoteas
yo entendí mejor que nadie esto
que fue como un solo de guitarra retumbando en mi cabeza
y te seguí por las calles de Abancay.
Tú, recién salidita de un cuadro a pincel de Laurenzi, altiva y
dibujada bella como una bengala
mientras continuabas caminabas oyendo canciones de los 70s
y tus pasos como notas musicales guiaban a mis dedos tocando
tus senos como en una serenata para celebrar la vida
huyendo del asombro de los ecos de las ráfagas de las metrallas
como un adobe frío a la deriva y merced del crudo invierno
o catres oxidados o platos despotricados o duraznos agusanados.

IV
Yo adoré tu forma de amar, fresca como un eucalipto en
luvia de marzo
que quiso ser un níspero en tiempos de hambruna
y yo quiero ser un níspero en tiempos de hambruna
porque el sexo fresco y dulce y salvaje como una fruta andina
es también como un manojo de estrellas iluminando el Quisapata
que es también algo tan parecido a ti cuando:
1.- Echada en mi cama bocabajo dibujas los andes con tus
formas.
2- Te estrellas en mi pecho como un kamikaze enamorado
3.- Te estrellas en mi pecho como un kamikaze enamorado otra
vez.
Y aquí me tienes pensando y repensando como hallar la ecuación
que te envuelve
y tus versos son más que un conjunto de palabras, una melodía
de guitarra terciopelo
como un rockstar abrazado al falo de la vida
o un Mochika enloquecido en las esculturas del amor.
Y vamos navegando en un océano de fuego 57 km alejados de la
muerte, pero cerca de Cachora
Music and carnival of Cachora
Y fue entonces que descubrimos (en una pintura rupestre
pintada siglos atrás, como un hermoso grafiti)
El fruto tostado de tu sexo dorado.

V
Nuestra larga avenida que conecta Abancay y Tamburco
es también una definición borrada de Wikipedia
ya no sabremos decir adiós.


 ENCONTRANDO A ENRIQUE DELGADO EN EL GÉNESIS DE LA CUMBIA
MIENTRAS OBSERVAS UN CUADRO DE MONET
EN UN RESTAURANTE

De pronto desperté regado en la banca de un parque
abrazado a tu sombra y de almohada solo poemas
de 1970, y un par de Vallejo en el parque Vallejo
esta ciudad siempre fue muy chica para nuestra poesía
por eso tratábamos de ancharla anchando sus mercados
y sus parques y sus calles adoquinadas
y sus combis de la ruta Hunter cercado Hunter.
Conocimos a Juan Ramírez Ruiz en un PDF
y el PDF salió a la calle y se tomó un ron y un café con leche
y danzó una danza tribal bajo nuestra luna a las 2:00 am.
No teníamos luz en los bolsillos
el vacío abrazaba nuestro estómago siempre vacío
mientras cabalgábamos por las calles del cercado.

No solo de pan vive el hombre, ni solo de versos el poeta
por eso Maiakovski decidió ser hombre y poeta, y conquistar
el pan a través de los versos.

Y nos han mirado con desprecio mientras incendiábamos
los viejos tambores de la poesía
mientras incendiábamos los zapatos gastados de la poesía
envueltos en yerba y humo
en yerba y trapecios amargos de indigeridos prejuicios
porque yo vengo del trapecio andino
y he arrastrado mis pies hasta esta ciudad
y he arrastrado mis sueños hasta esta ciudad
y he desgastado mis dedos en esta ciudad.
Como lo hizo la señora Martha Vilca, que es de Moquegua pero
prepara los mejores chicharrones cusqueños en Arequipa.
Y tú vas rodando por la calle Ayacucho vas rodando por la vida
buscando encontrándote a ti y a mí en un coito explosivo.

Encontrando a Enrique Delgado en el génesis de cumbia
mientras observas un cuadro de Monet en un restaurante
donde vas comiendo y digiriendo un plato de arroz
almorzando frente al Hospital Goyeneche, dándole la
espalda a la tv, porque la calle es un mejor espectáculo
mientras el anciano de a lado sacude sus dedos esperando
sentado su orden. Como quien espera a la muerte.
Comiendo y digiriendo un plato arroz
y comiendo y digiriendo un plato de melancolía
y de postre la ausencia que nos ahorca
la ausencia que llega con 3 meses de embarazo
la ausencia que deja una huella sobre el colchón
que abandona una camisa planchada, que es una silla sobrando
a la hora de la cena
la ausencia que envejece y se pudre de madura
la ausencia que te lleva de la mano hasta el jardín de niños
y te deja en la puerta del salón
la ausencia que sabe a fosa común, porque
la sangre del pueblo tiene rico perfume
huele a jazmines, violetas,
geranios y margaritas;
a pólvora y dinamita.

Y ahora debemos ir a trabajar
lo bueno del libre mercado,
es que uno puede escoger a su explotador.




ÁLVARO CORTÉS MONTUFAR
Nació en Abancay, Perú. Egresado de la facultad de ciencias económicas de la Universidad Católica de Santa María de Arequipa. Codirector de la Editorial La Chimba. Es miembro del equipo organizador del festival cultural “Calateando la Metrópoli” (Arequipa, 2016) y La caravana de la poesía bloque Arequipa (Arequipa, 2017).  Ha sido publicado en las antologías GALIZA - PERÚ: Libérrimo Austral (Roteiro das Artes, 2017), Un Otoño Azul (Cuervo editores, 2018). Realiza lecturas desorganizadas en calles, plazas y mercados. Ha publicado Apurímac Radio Poder (2017).